ADRIANA RAMÍREZ FE.- Ya comenzado el curso universitario, hemos querido entrevistarnos con el P. Enrique Somavilla, rector de los Estudios Superiores del Escorial y del Real Centro Universitario Escorial-María Cristina. El Padre Enrique es sacerdote agustino, doctor en teología, doctor en derecho y doctor en administración de empresas, entre otros títulos académicos.
Iniciamos curso académico y lo hacemos con novedades como la adscripción a la Universidad CEU San Pablo ¿Qué beneficios conlleva este cambio?
El cambio de universidad de adscripción ha sido una decisión meditada que obedece fundamentalmente a una evolución natural y una estrategia de futuro, en la que se ha buscado unir fuerzas con una institución afín con la que, respetando la singularidad de cada una, compartimos principios y objetivos, como es el caso de la Universidad CEU San Pablo y la Asociación Católica de Propagandistas.
María Cristina ofrece formación en los grados en Derecho, ADE, Teología y el Máster de Acceso a la Abogacía y la Procura. De cara a un futuro ¿puede ésta suponer la ampliación de la oferta formativa a otras áreas como la sanitaria -medicina o enfermería-, teniendo en cuenta que el comarcal El Escorial es también Hospital Universitario?
R.- La adscripción a la Universidad CEU San Pablo abre grandes expectativas de cara al futuro y un amplio abanico de posibilidades de nuevas titulaciones. La puesta en marcha de nuevas titulaciones requiere de un largo proceso burocrático que, en el caso de las titulaciones sanitarias, es incluso más complejo. La elección de las futuras titulaciones dependerá de los estudios de mercado, necesidades de inversión, autorización de cupos de estudiantes, etc. De momento, le adelanto en primicia que para el curso 2024-2025 estamos trabajando conjuntamente con la Universidad CEU San Pablo y un grupo de empresas interesadas, para la puesta en marcha de un máster internacional de dos años de duración sobre “Alternative protein sustainable value chains”. Este máster supone una apuesta por contenidos innovadores y vanguardistas, y por el mercado internacional.
Padre, ¿qué particularidades ofrece este Centro Universitario con respecto a otros campus madrileños?
El Real Centro Universitario Escorial-María Cristina es una pequeña joya en el ámbito educativo universitario. 133 años de historia avalan una trayectoria de excelencia, en un marco arquitectónico y geográfico incomparable. Los Estudios Superiores de El Escorial fueron creados por la Reina Regente María Cristina de Habsburgo y Lorena en 1892, siendo por lo tanto de fundación real y estando bajo el protectorado de la Corona de España. Además de un entorno único en la sierra de Madrid, y un complejo arquitectónico del siglo XVI, las enseñanzas en el Real Centro destacan por su carácter personalizado, con grupos reducidos, y por la importancia de la formación humanística de los alumnos, lo que le diferencia de la mayoría de los campus existentes en la Comunidad de Madrid.
Aunque estemos en un edificio histórico, María Cristina cuenta con unas instalaciones de última generación, en una constante apuesta por la renovación. Y vemos que, además, de los servicios necesarios para el estudio, al aspecto deportivo también le dan gran importancia.
Entre los años 1990 a 1997 se llevaron a cabo una serie de reformas del centro universitario realizadas por la Orden de San Agustín, que incorporaban nuevas instalaciones y la actualización de las ya existentes, incluyendo un Aula Magna con capacidad para 425 personas, una biblioteca moderna con un gran fondo documental y dotada con las últimas tecnologías, piscina, gimnasio, pista de tenis, y un gran espacio polideportivo. Estas nuevas instalaciones fueron inauguradas por SSMM los Reyes en febrero de 1998. Es curioso porque la mayoría de los habitantes de San Lorenzo desconocen el Real Centro y quedan muy sorprendidos cuando lo visitan y descubren lo grande que es el complejo y las instalaciones de las que está dotado.
¡Háblenos ahora del emblemático Colegio Mayor!
El Colegio Mayor ha sido todo un referente para generaciones de alumnos que han pasado por María Cristina. Existen crónicas de la vida en el Colegio Mayor desde 1898, recogidas en la revista “El Colegial” y posteriormente en “Nueva Etapa”, que relatan la vida de los colegiales, anécdotas, actividades, etc. Muchas de las grandes personalidades que han pasado por las aulas de María Cristina han residido en el Colegio Mayor, en el que convivían colegiales y padres agustinos, en un ambiente de estudio, disciplina y camaradería. El Colegio Mayor ha sido conocido históricamente como un “Colegio de linajes”, en el que era habitual que estudiasen y residiesen generaciones de una misma familia. En la actualidad, tenemos un alumno de ADE, Rodrigo Ramos Manzano, que es la cuarta generación que estudia en María Cristina. Desde la pandemia, el Colegio Mayor no tiene colegiales residentes, siendo utilizadas sus instalaciones para la organización de congresos, retiros espirituales y todo tipo de actividades formativas. A partir del curso 2025-2026 está previsto abrir de nuevo la residencia, pero ya como Colegio Mayor adscrito a la Universidad CEU San Pablo.
Tengo entendido que a los estudiantes internos les organizaban muchas actividades complementarias. Salidas culturales y hasta una compañía de teatro universitario. Sólo les falta la tuna.
Como te comentaba anteriormente, la vida colegial era intensa y llena de actividades complementarias a los estudios universitarios. Afortunadamente existe constancia escrita del día a día en el Colegio Mayor, descrita por los propios colegiales, en la que se detallan las fiestas, campeonatos deportivos, anécdotas, celebraciones, etc. Una joya de la vida colegial desde 1898 hasta ahora. En la actualidad, aún sin estar activo el Colegio Mayor, se mantiene el Grupo de Teatro y el equipo de futbito. El grupo de Teatro, dirigido por un antiguo colegial, Manolo Otero Cantudo, está formado por alumnos y antiguos alumnos de María Cristina, y anualmente estrenan una obra en el salón de actos del Real Colegio Alfonso XII.
El Centro Universitario y el Colegio Mayor han sido históricamente un referente nacional, donde han estudiado muchas personalidades del mundo político, literario…
Efectivamente, el listado de personalidades del mundo de la política, la literatura, la cultura, la academia o el derecho sería interminable. Baste nombrar a título de muestra alguno de nuestros más renombrados licenciados, como son:
Manuel Azaña Díaz (presidente de la República y presidente del Consejo de Ministros); Pedro Sánchez Pérez-Castejón (presidente del Gobierno); Rafael Sánchez Mazas (ministro y escritor); Dámaso Alonso (literato y académico de la Lengua); Julián Zuazo (académico de la Historia); Juan Ignacio Luca de Tena (director del ABC); Eduardo Aunós (ministro); José Yanguas Messía (ministro y catedrático); José López Ortiz (obispo y Vicario General Castrense); Dionisio Ridruejo (escritor y Consejero Nacional); José María Alonso Gamo (diplomático y poeta); Luis Martínez de Irujo (Duque de Alba); Antonio Tovar (rector de Universidad y catedrático); José Soto Reguera (diputado); Federico Moreno Torroba (académico de Bellas Artes y compositor); Manuel Fernández Núñez ( académico de la Historia); José Múgica ( alcalde de San Sebastián y abogado); Antonio Fernández-Cid ( académico de Bellas Artes); Luis López Ortiz ( magistrado del Tribunal Supremo); Manuel Piñeiro Souto ( embajador); Matías Prats (periodista); Carlos Martínez de Irujo (periodista); Antonio Rodríguez-Moñino (académico y bibliófilo); Epifanio Rodríguez Nava (alcalde de Ávila); Manuel Guerrero Pemán (presidente de Repsol Butano); Modesto Barcia Lago (presidente del Colegio de Abogados de Pontevedra); Manuel Argüelles (ministro); Román Escochotano Álvarez de Lorenzana (diplomático); Ángel Martín Torres (socio de KPMG); Javier Menor Pérez (socio director, Baker McKenzei); Joaquín Aguirre González (Corporate Legal Director, Naturgy), entre otros. Hubo una época en la que en el Congreso de los Diputados llegaron a coincidir 18 diputados licenciados por María Cristina, siendo conocidos como “la minoría de El Escorial”.
Con la perspectiva que dan tantos años formando generación tras generación ¿Se podría realizar un breve análisis del cambio social en cuanto al perfil estudiantil? ¿O sería aventurarse demasiado?
Sería tanto como hablar del cambio social habido entre 1892 y 2024. Pero con independencia de los cambios sociales, hay elementos que permanecen inalterables en el perfil de nuestros alumnos, como decía uno de mis antecesores en el rectorado, el Padre Javier Campos y Fernández de Sevilla: “han pasado por nuestras aulas unos cuantos miles de jóvenes que se han formado en libertad y con disciplina; han aprendido leyes y economía; también han descubierto el valor del compañerismo y la lealtad de la amistad. Todos se han enriquecido dialogando con los otros, tolerando la diversidad y respetando el pluralismo de ideas, credos y opiniones, que, aquí en María Cristina, se convertían en un microcosmos, dadas las dimensiones reducidas del pueblo, el Colegio Mayor y las aulas”.
Sin dejar los análisis ¿con qué porcentaje de alumnado cuentan de fuera de la Comunidad Autónoma de Madrid, qué porcentaje de madrileños y qué porcentaje son escurialenses?
Con excepción de los alumnos extranjeros de Erasmus, la práctica totalidad de nuestros alumnos provienen de los pueblos de la zona noroeste de Madrid. De ellos, gran parte son alumnos de San Lorenzo y de El Escorial.
María Cristina siempre ha intentado favorecer a las familias escurialenses cuyos hijos han optado por formarse en esta Universidad, con ayudas a través de becas o medias becas ¿Se sigue haciendo?
Existe un convenio firmado entre el Real Centro Universitario y los Ayuntamientos de San Lorenzo del Escorial y de El Escorial, por el que los alumnos empadronados en estos municipios cuentan con importantes becas para cursar sus estudios en María Cristina. También hay acuerdos firmados con otros 30 municipios de la zona por el que los estudiantes empadronados en ellos gozan igualmente de ventajas económicas.
¿Con cuántos alumnos externos cuenta el nuevo curso escolar?
Este año académico 2024 – 2025 es un año de transición. Ha sido en septiembre de 2024 cuando el Real Centro Universitario Escorial-María Cristina ha pasado a ser un Centro Adscrito a la Universidad CEU San Pablo, con lo que iniciamos una nueva etapa. En la actualidad tenemos cerca de 200 alumnos matriculados en las diferentes titulaciones. A partir del curso que viene, cuando empiece a funcionar de nuevo el Colegio Mayor y empecemos a ofertar nuevas titulaciones, el objetivo es duplicar el número de alumnos actuales, potenciando también la presencia de alumnos internacionales.
Hemos echado de menos este año la organización de los Cursos de Verano en María Cristina. ¿Supone esto el final de una etapa?
Efectivamente, supone el final de una etapa y el inicio de otra. Durante 36 ediciones María Cristina ha sido la sede de los Cursos de Verano de la Universidad Complutense. Con el cambio de universidad de adscripción este año no ha sido posible alojar la sede de los cursos, pero en 2025 iniciaremos una nueva etapa de Cursos de Verano de El Escorial con la Universidad CEU San Pablo, lo que sin duda será un gran acontecimiento y un gran éxito para San Lorenzo de El Escorial, que contará con una mayor oferta educativa y cultural.
Páter, terminamos. ¿Cómo ve el futuro de los Estudios Superiores de El Escorial dentro del actual panorama universitario?
Con absoluta confianza y gran ilusión. María Cristina reúne todos los elementos para ser un centro de referencia en el ámbito universitario, y ese es nuestro objetivo. Hace tres años visitó el Centro Universitario un importante político español con altas responsabilidades en Europa. No conocía María Cristina y se quedó impresionado y sorprendido por el lugar y el entorno. No comprendía cómo él no conocía una joya como el Centro Universitario Escorial-María Cristina, comparándole con cualquier College de Oxford y Cambidge. Esta nueva etapa que iniciamos, dirigida y apoyada por la Orden de San Agustín, y junto a la Universidad CEU San Pablo, supone un gran reto y un ilusionante proyecto para el futuro del Real Centro y para San Lorenzo de El Escorial.
